lunes, 16 de noviembre de 2015

Lizarraldeko ordua da - Es la hora de Tierra Estella

Después de los duros años pasados bajo el régimen de UPPSN (UPN+PSN) ha llegado la hora de Tierra Estella. Gure ordua heldu da.

Tras las pasadas elecciones municipales, el mapa municipal navarro se ha pintado con los colores del cambio. En Iruña, tenemos de alcalde a Joseba Asirón, en Tudela tenemos de alcalde a Eneko Larrarte, en Tafalla a Adolfo Goldarazena, etc, etc. Todos estos alcaldes tienen algo en común son alcaldes del cambio y se tiene que notar en algo más que gestos, se tiene que notar el cambio en algo más que en poner ikurriñas un día en fiestas.

Eso en el ámbito navarro, pero en el ámbito de Tierra Estella. ¿Qué tenemos? Pues tenemos todo. En la Federación Navarra de Municipios y Concejos tenemos a Pablo Azcona, alcalde de Lodosa y miembro de Aralar, en la mancomunidad tenemos a Marivi Sevilla, concejala en Lodosa y presidenta de la mancomunidad, en la cabeza de Merindad tenemos a Koldo Leoz, alcalde de Estella-Lizarra con el apoyo de los partidos del cambio y un alcalde con visión de Merindad.

Eso en el ámbito de Tierra Estella, pero en el ámbito de Lerín. ¿Qué tenemos? Pues tenemos la mayoría. Plataforma de Lerín más Lerín Unido-Lerin Berria suman 5 concejales frente a los 4 concejales de UPN. En Lerín tenemos la oportunidad de trabajar por el cambio al mismo tiempo que en el resto de la Merindad, al unísono con el resto de Navarra. Lerín no puede ser indiferente al cambio.

Debido a la perversa concepción de la democracia que nos han impuesto en los últimos años, los alcaldes y alcaldesas de los diferentes municipios y ciudades han llevado a cabo una política desarrollista y de inauguraciones, donde solo valía, construir y construir, para dejar el pueblo bonito, para que se les votara en las siguientes elecciones municipales; todos los pueblos, desde el más pequeño al más grande, debían tener su polideportivo, sus piscinas, su gimnasio, su polígono, etc., etc., infraestructuras excesivas, que ahora se muestran en la mayoría de los casos harto deficitarias.

Por ello, se hace necesario trabajar en clave de Merindad, Lerín sólo lo tiene muy difícil para salir adelante, debemos mancomunar servicios, infraestructuras y todos los recursos  que podamos con los demás pueblos de Tierra Estella, juntos y unidos es más fácil pasar los malos momentos.

Hemos pasado una época de oscurantismos, de amiguismos y de un régimen que solo favorecía a los suyos, a unos gobiernos del cambio, por lo menos ilusionantes. Pero para que este cambio llegue a buen puerto todos y todas debemos ser un poquito más humildes, dejarnos de personalismos y de rencores individuales y ponernos a trabajar en clave de Merindad; ya que de lo contrario condenaremos a nuestro pueblo a otros cuatro años de inanición y espera, y que nadie lo dude, el cambio ha llegado y es para quedarse, Lerín debe subirse al tren del cambio o ya nos podemos dar por jodidos.